Se puede comer barato a muy pocos pasos del centro de la ciudad. Un „Bauernfrühstück“ (desayuno fuerte a base de patatas rehogadas, huevos revueltos y tocino) cuesta 2,90 euros, la salchicha tipo Bock, 1,35 euros, y la taza de café correspondiente, 1 euro. Nuestro colega Jörg diría: “¡Estos son precios como en los tiempos de paz!”.
Entre retratos en blanco y negro y coloridas muestras graffiteras (desgraciadamente a las últimas se les ha ido ya el color), probamos hace poco también una sopa de verduras italiana (minestrone), café con leche y una Now-Orange-Cola (la del camaleón en el cuello de la botella).
¿Dónde? En la cantina de la Volkhochschule, en la Löhrstrasse (abierta para profesores, estudiantes y todos aquellos que pasen por la puerta). Aquí estaréis bien, también entre productos locales como la soljanka, la Lipz-Schorle o la Vita-Cola, y nadie os molestará.
Si podéis, ¡id también al patio! Allí veréis la antigua “Ring-Messehaus” por detrás. Delante, en el Ring, aparece una información sobre su restauración para convertirlo en hotel. También hemos escuchado que se van a abrir al público otras cantinas, como la del Ayuntamiento Nuevo, la de la Delegación de Hacienda (Leihhaus) y la de la AOK (en la Jahnallee). Ya veremos.
Traducido y adaptado por María González de León
